Reparto de África

    Europa se reparte África 

(“Conferencia de Berlín” 15 de noviembre de 1884 – 26 de febrero de 1885)

“Carrera de Campanarios”.

 A finales del siglo XIX la llamada “Conquista Colonial de Campanario” ocurre cuando todas las potencias europeas querían adueñarse de porciones del territorio en el continente africano dando origen  a una muy fuerte disputa que sirvió como germen, entre otras muchas causas, a la primera guerra mundial en 1918, En este contexto de tensión y disputas geográficas, el Canciller de Alemania Otto Bismarck  decidió convocar a una conferencia en Berlín con doce países europeos que se disputarían África.

“La Conferencia de Berlín de 1884-1885 se convocó para decidir los derechos comerciales de los países europeos en África y principalmente, en la cuenca del Congo. El resultado fue el Estado Libre del Congo, que acabó siendo el escenario de uno de los peores genocidios de la historia” (Wikipedia).  

   “Conferencia de Berlín” 

“Un pueblo que no conoce su pasado, su origen y su cultura, es como un árbol sin raíces”  (Marcus Garvey).

“En nombre de Dios todo poderoso; por todos los participantes, África, esta tierra sin dueño y tan codiciada, no tendrá un solo participante a partir de ahora, sino varios y todos ansiosos por oro, materias primas y manos de obra barata”. Texto increíble con el que se sella  en el “Acta Final” el reparto de África en la “Conferencia de Berlín”.

“Lo que acaban de leer o escuchar e incluso surrealista, pero son las declaraciones que firmaron sobre el reparto de África sin participación de los propios africanos”.                (Wikipedia).

“No podemos dejar escapar África”: -Josep Borrell. Actual Alto Representante de la U.E. para asuntos exteriores y política de seguridad, 2024-. 

Bismarck  a instancias de Gran Bretaña convoca a la “Conferencia de Berlín” en 1884.

Alemania.

Bélgica. Leopoldo II. Cuenca del rio Congo, “Propiedad privada” del Rey, 1908 “Congo Belga” 2.000.000 de Km2 (actual República Democrática del Congo). En 1876 el Rey de Bélgica Leopoldo II contrata por cinco años  a exploradores, quienes recorrieron el rio Congo en procura de los principales productos para su  explotación: marfil y a partir de 1890 el caucho, recolectado por parte de esclavos que debían cumplir con una cuota mensual, lo que implicaba que si no recogían la cantidad dispuesta le cortaban la mano (hay fotografías subidas a Internet con amputados).

Principales afortunados:

Inglaterra: Egipto, Nigeria, Sudan, Kenia y Sudáfrica.

Francia: África Noroxidental, Marruecos y Argelia. 

Portugal.

España.

Italia.

Bélgica.

Y otros…

Invitados:

Imperio Otomano. 

Estados Unidos.

En dicha “Conferencia de Berlín” se repartieron el Continente Africano, sin contemplar las culturas previas,  ni límites geográficos. Fragmentado (como una torta) en la Conferencia de Berlín 1884 – 1885.                                      

La mayoría de los países convocados no tenía ningún conocimiento de África a excepción del Reino Unido de Inglaterra que había mandado “adelantados” como Henry Morton Stanlry (1874 – 1877) para que recabaran datos de diferentes regiones del continente: conformación social de tribus, jefaturas, pacifismo o beligerancia, recursos naturales, vías fluviales, idioma, religión,  cartografía, etc. Datos importantes para la  colonización y apropiación que le sirvieron a la hora de la “Conferencia de Berlín”, procurando con esta información la posesión de las más ricas zonas en todo recurso, fáciles de conquistar, explotar y exportar. Conducta que dio origen, más tarde y sin proponerse, a la disciplina de la  antropología como ciencia, ajena a intereses económicos espurios.

Como saldo del pillaje de África en manos de los países europeos más prósperos murieron más de 15.000.000 de esclavos despojando, hasta hoy en día, recursos naturales valiosos. La mayoría de los actuales países lograron la independencia pero siempre condicionados por sus históricos saqueadores. Ejemplo de la actual explotación es lo que ocurre en el Congo detrás del “coltan” (sub producto “tantalio”) el “oro negro”, mineral abundante en esa zona, escaso en el mundo y el holocausto consecuente, silenciado por los “medios”, de 11.000.000 de africanos: niños, joven, adultos, viejos y mujeres (2023).  

Como ejemplo de la prometedora nueva época que se avecina -ajena al neocolonialismo   actual- es el caso del nuevo gobierno de la Republica de Niger -a partir de agosto de 2023- (históricos proveedores del uranio para alimentar los reactores nucleares de Francia) expulsando  de su región a los colonizadores franceses y norteamericanos con sus respectivas   bases militares.